jueves, 14 de enero de 2010
lunes, 4 de enero de 2010
Un detalle para el éxito en 2010 y siempre!!!
Dar gracias hace que uno sea feliz
Por Luis Sagarra Benito
1Ts 5:18 Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios…
1Ti 2:1 Exhorto…a que se hagan…acciones de gracias…
Col 3:15 …y sed agradecidos.
Existen 80 versículos en la Biblia que contienen la palabra “gracias”, 199 versículos contienen la palabra “gracia” y 2 versículos la palabra “agradecidos”; en total 281 veces la Biblia nos anima a dar las gracias y reflexionar en la gracia.
Es necesario reconocer que continuamente recibimos algo gratuito, que no nos merecíamos, que en justicia no nos correspondía, pero que la gracia de Dios directa o a través de otras personas, nos visitó y nos hizo receptores de algún bien o favor inmerecido.
La amargura y la gratitud se repelen entre sí. El rencor y la gratitud se repelen entre sí. El odio y la gratitud no pueden convivir juntos.
Ser agradecido o ser ingrato, ES UNA DECISIÓN personal de cada persona. Centrarnos en contar las bendiciones que tenemos, es una decisión sabia, sobre todo en tiempos difíciles y de crisis.
2Ti 3:2 Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, 2Ti 3:3 sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, 2Ti 3:4 traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, 2Ti 3:5 que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita.
Las personas ingratas siempre harán énfasis en lo que dejaste de hacer por ellos, no importa cuánto te has esforzado o cuantas cosas buenas han recibido de Dios a través de ti, siempre te guardaran rencor porque un día no hiciste lo que ellos esperaban que hicieras.
Hay que decirlo de forma regular para obtener los beneficios, dice una experta de la Univesidad de California
SAN PETERSBURGO, Florida.— Bill Golden sobrevivió más de 20 años en el ejército y otros 30 como agente policial.
Enfermó de cáncer de colon y, a los 86 años, tiene una cadera artificial y artritis en las rodillas.
A pesar de ello, Golden de todas formas da gracias, y los investigadores dicen que ésa actitud agradecida puede ser buena para cualquiera.
Desde hace tiempo los académicos han teorizado que las expresiones de agradecimiento promueven la salud y la felicidad, y dan optimismo y energía a los oprimidos. Ahora, el estudio de la gratitud se ha vuelto un campo floreciente para sorpresa de muchos, y las investigaciones indican que el ser agradecido podría ayudar a la gente a sentirse mejor. Sin embargo, hay un requisito: es necesario dar las gracias más de una vez al año.
“Si usted no lo hace en forma regular no recibirá los beneficios”, dijo Sonja Lyubomirsky, profesora de sicología en la Universidad de California, plantel Riverside. “Es como si usted fuera al gimnasio una vez al año. ¿Qué beneficios obtendría de ello?”
En los últimos años, investigadores han tratado de medir los beneficios de la gratitud.
En un estudio financiado por la Fundación Nacional para la Ciencia, el sicólogo David DeSteno, de la Universidad Northeastern, hizo que los participantes completaran una ardua tarea inicial de vaciado de datos sólo para perderla posteriormente debido a una falla de cómputo. Luego, un asistente de laboratorio, desconectado del estudio y que decía tener prisa para su propio experimento, recuperó el trabajo perdido al ayudar a los participantes.
DeSteno halló que era más probable que los que habían recibido ayuda del asistente, y que la agradecieron, devolvieran el favor, y que lo hicieran por más tiempo que quienes no recibieron ayuda.
“La gratitud lleva a la gente a actuar de formas virtuosas o más desinteresadas”, dijo DeSteno, cuya trabajo fue publicado anteriormente en el año en la revista Current Directions in Psychological Science (Tendencias Actuales en la Ciencia Psicológica). “Y construye respaldo social, que sabemos está vinculado con el bienestar físico y sicológico”.
Robert Emmons, profesor de sicología de la Universidad de California, plantel Davis, dijo que quienes ofrecen gratitud son menos envidiosos y rencorosos. Duermen más, hacen más ejercicio y reportan un descenso en su presión arterial, aseguró Emmons, que escribió Thanks! How Practicing Gratitude Can Make You Happier (¡Gracias! Cómo el practicar la gratitud puede hacerlo más feliz).
Brenda Shoshanna, de Nueva York, estuvo de acuerdo con su colega californiano.
“Uno no puede estar deprimido y agradecido al mismo tiempo”, dijo Shoshanna, autora de 365 Ways to Give Thanks: One for Every Day of the Year (365 formas de dar gracias: una para cada día del año). “Hace que una persona sea más saludable en lo físico, en lo mental y en todos los aspectos.’’
En cuanto a Golden, no le presta mucha atención a los académicos. Sólo reconoce que es un tipo afortunado, agradecido por sus dos hijos, dos nietos, y su novia de 89 años.
En el último jueves de noviembre, él y su familia se reunieron para el feriado estadunidense de Acción de Gracias por las buenas cosechas. Se tomaron de las manos e hicieron precisamente lo que se conmemora en la ocasión: Decir gracias. “Es sorprendente lo que esa palabra hace por una persona”, dijo. “Es fácil de decir y hace mucho bien”.
Hay que decirlo de forma regular para obtener los beneficios
Desde hace tiempo los académicos han teorizado que las expresiones de agradecimiento promueven la salud y la felicidad, y dan optimismo y energía a los oprimidos.
Ahora, el estudio de la gratitud se ha vuelto un campo floreciente para sorpresa de muchos, y las investigaciones indican que el ser agradecido podría ayudar a la gente a sentirse mejor. Sin embargo, hay un requisito: es necesario dar las gracias más de una vez al año y que sea de corazón.
Sonja Lyubomirsky, profesora de sicología en la Universidad de California, plantel Riverside, lo dice así: “Si usted no lo hace en forma regular y de corazón no recibirá los beneficios”, “Es como si usted fuera al gimnasio una vez al año. ¿Qué beneficios obtendría de ello?”
En los últimos años, investigadores han tratado de medir los beneficios de la gratitud.
Hallaron que era más probable que los que habían recibido ayuda, y que la agradecieron, devolvieran el favor. Los que no son agradecidos actuaron igual que los que no recibieron ayuda.
“La gratitud lleva a la gente a actuar de formas virtuosas o más desinteresadas”, dijo DeSteno, cuya trabajo fue publicado anteriormente en el año en la revista Current Directions in Psychological Science (Tendencias Actuales en la Ciencia Psicológica). “La gratitud construye respaldo social, que sabemos está vinculado con el bienestar físico y sicológico”.
Robert Emmons, profesor de sicología de la Universidad de California, plantel Davis, dijo que quienes ofrecen gratitud son menos envidiosos y rencorosos.
Duermen más, hacen más ejercicio y reportan un descenso en su presión arterial, aseguró Emmons, que escribió Thanks! How Practicing Gratitude Can Make You Happier (¡Gracias! Cómo el practicar la gratitud puede hacerlo más feliz).
Brenda Shoshanna, de Nueva York, estuvo de acuerdo con su colega californiano: “Uno no puede estar deprimido y agradecido al mismo tiempo”, dijo Shoshanna, autora de 365 Ways to Give Thanks: One for Every Day of the Year (365 formas de dar gracias: una para cada día del año). “Ser agradecido de corazón y expresarlo, hace que una persona sea más saludable en lo físico, en lo mental y en todos los aspectos.’’
Decir: “gracias”. Es sorprendente lo que esa palabra hace por una persona. Es fácil de decir y hace mucho bien.
Luc 17:17
Respondiendo Jesús, dijo:
¿No son diez los que fueron limpiados?
Y los nueve, ¿dónde están?
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